Nos encontramos en una era de cambios, no sólo este año 2020 por toda la problemática alrededor de la pandemia por Sars Cov 2, sino porque el mercado laboral está cambiando a gran velocidad, y no solo en lo que tenga que ver con tecnología e innovación, también en el perfil ideal de los trabajadores.
Para adaptarnos a estos cambios debemos utilizar todas las herramientas que tenemos a nuestro alcance, y la mejor herramienta que tenemos somos nosotros mismos: debemos convertirnos en trabajadores del futuro, los conocidos como KNOWMADS.
Hasta hace algunos años, en la mayoría de las empresas se buscaba la especialización en las tareas, trabajadores muy buenos en su puesto, pero no tan buenos en puestos diferentes. Actualmente, el perfil de trabajador más solicitado es el llamado KNOWMADS: son trabajadores innovadores, creativos, imaginativos, flexibles, ven más allá del fracaso, asumen su error y aprenden de él, combinan habilidades de diferentes trabajos… además, en este tipo de trabajadores no se tiene en cuenta la edad.
En este entorno laboral cambiante, surge una nueva forma de trabajo en equipo: AGILE: una nueva forma de trabajar en equipos flexibles que permite crear y responder a los problemas de forma rápida, «ágil». Esta forma de trabajo busca equilibrar flexibilidad y estabilidad. Suelen utilizar una metodología SCRUM: busca organizar y administrar trabajos complejos en sprint, es decir, en plazos de 15 días o una semana.
Esta forma de trabajo «AGILE» aporta diferentes beneficios a las empresas: mejora la eficiencia del equipo, mejora la comunicación, aumenta la capacidad para adaptarse a los cambios…
Pero, no sólo está cambiando el perfil de los trabajadores, en un mundo empresarial cada vez más competitivo e impredecible, las empresas también deben aprender a adaptarse a las nuevas circunstancias. Actualmente las empresas tienen dos opciones: «Adaptarse e innovar o innovar y adaptarse». Hay muchos ejemplos de empresas que no supieron adaptarse a los cambios y terminaron quebrando.
¿Qué debe hacer una empresa para adaptarse? Es necesario un cambio en la cultura y la estructura de la empresa, y dirigirla hacia una cultura innovadora, definiendo una nueva estructura que impulse esta innovación. Las empresas que pretendan este cambio deben fomentar entre sus trabajadores la atracción y retención del «talento», impulsando el intraemprendimiento; es decir, las empresas que aspiren a innovar y adaptarse buscarán y mantendrán entre sus trabajadores personas innovadoras y emprendedoras (ya comentaba en una entrada anterior qué cualidades deben tener estos innovadores)
Además de estos cambios en el perfil de los trabajadores, en la forma de trabajar, en la cultura empresarial, debemos tener muy en cuenta los cambios tecnológicos que afectan al mercado laboral: la TRANSFORMACIÓN DIGITAL de las empresas, entendiendo como esta transformación la aplicación de tecnologías digitales a los procesos productivos de la empresa.
5G, impresión 3D, Inteligencia Artificial, Comercio Digital, Industria 4.0., Blockchain… consiguen que la forma de hacer negocios, las cadenas de producción, la relación de las empresas con sus clientes esté continuamente cambiando.
En conclusión, debemos de ser conscientes de los cambios que hay a nuestro alrededor, reinventarnos, adaptarnos a las nuevas circunstancias del mercado laboral e intentar convertirnos en esos konwmads tan cotizados por las empresas. Siempre, claro está, que pretendamos ser los nuevos trabajadores del futuro.